EL CABRITO Y EL LOBO FLAUTISTA

Un cabrito se entretuvo en un prado y, de pronto, se encontró alejado del rebaño.

Al ver que lo perseguía un lobo, se volvió y le dijo:

-Comprendo, lobo, que seré tu almuerzo. Pero... para no morir sin honor, toca la flauta y yo bailaré.

Y así lo hicieron. Pero los perros, al oír el ruido, se asomaron y vieron al lobo. Éste, descubierto, se dijo:

-Muy bien empleado me está, porque siendo yo cazador, no debí meterme a flautista.

"Analiza siempre las propuestas de los demás, para no sentirte defraudado con sus consecuencias"

(Esopo)